sábado, marzo 21, 2009

de cómo las cosas no son lo que aparentan


mer querida:

dos cosas para comentar. la primera es que la médica a la que fui tan desconfiada resultó ser una mujer amable, cariñosa y atenta (nada que ver con la otra, la filosa a quien respeto aunque me maltrate). además es homeópata! así que me fue super con eso. la segunda es que el souvenir amsterdamiano - la golosina lisérgica - resultó un fiasco. feo gusto y nada de delirio.

espero que estés bien. te abrazo fuerte fuerte,

c.

ps. vino mi papá y con su sapiencia (y sus manos) plantó los bulbos. no le pareció buena idea el haberlos conservado en el freezer. hubiera sido mejor en heladera, dijo. ahora queda esperar. puede florecer una mutación, eh. un otoño de 30 grados, hoy !

1 comentario:

Anónimo dijo...

Nunca nada es lo que aparenta. Jamás.