Si lo comparás con otros trenes viajo en uno de lujo. Por las mañanas no hay mucha gente en los vagones ni en los andenes y yo todavía siento que me estoy yendo de viaje. Hay de todo un poco (el conurbano es enorme y variado) y hay quienes van a la universidad (algunos docentes, ¿los demás irán en auto?) y se nota a la legua.
Un sólo poeta y varios teniente sargento general capitán y otros nombres que recuerdan tortura clandestinidad y desaparición forzada de personas. Ese es el panorama de la zona (y muchas maestras casadas con milicos, combinación peligrosísima). Y el paisaje va de arroyos espumados de contaminación a las casas lindas de Devoto, pasando por Agronomía y ese verde que parece inmenso pero no es. Los helicópteros, si hay, me despiertan algo feo (no se qué) pero los caballos pastando en el rocío me gustan y mucho. Compensa.
Una vez en San Miguel se abre otro mundo: un bar llamado Fierita, afiches de un grupo de rock queacelga?, muchos comercios de artículos automovilísticos - electricidad para el automotor, cosas así-, mansiones con jardines de un cuarto de hectárea y garage para tres autos, casa bajas, casa pobres, bicicletas, perros sueltos, jardines recortados o silvestres, deslucidos o trabajadísimos. Ahora también hay torres y están todos desconcertados con eso, parece.
Hay también ausencia de semáforos, sendas peatonales, frenos en general. El otro día ante ese comentario me dijeron: la vida allá vale menos y yo medio que me reí pero cuando veo una madre con dos niños y un carrito de bebé surcando la avenida entre colectivos feroces pienso que algo de cierto hay. Además hay muchos pajaritos y un sol que sólo encontrás al sur de la avenida Rivadavia, allá en Buenos Aires (o en CABA, ahora que digo AMBA).Lo que no hay es diseño palermitano (bendición) y quizás no haya diseño en absoluto (exagero).
Yo camino. Ignoro lo que dicen los chicos acá. Tengo una razón: a ellos ir a Capital les hace doler la cabeza y andan con la mochila adelante. Entonces no les hago caso y disfruto el aire frío y camino y piso las hojas ya otoñadas en las veredas.
4 comentarios:
muy lindo.
hoy, sí, es un día para andar caminando sobre hojas otoñales. no sé, creo que ahora agarro la cámaara de fotos y salgo a caminar un poco entre los árboles.
por fin escribiste algo inspirado de nuevo, no como esos comentarios revolucionarios agraviantes para el mundo moderno en contra de los tomates perfeccionados
callate, A, que lo que hago también lo hago por Persiana, Elegante y los que vengan detrás!
hola, mato!
y las fotos?
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