No puedo postear nada propio. Pero hoy pasé por TP (www.bonk.com.ar) y leí de un post ajeno esto (ella a su vez, está hablando de su lectura de Freud en el subte de Buenos Aires):

Me interesa el relato de cómo operan los mecanismos para protegerse del sufrimiento y crearse un seguro de dicha: la sustitución, las distracciones y la intoxicación. Llama al arte una sustitución, a la ciencia (al trabajo) una gran distracción y recuerda la obviedad de que la más efectiva de las formas de procurarse olvido (placer) inmediato es la intoxicación con determinadas sustancias embriagadoras. El programa de ser felices es irrealizable –dice- pero tampoco es posible resignar los esfuerzos por acercarse de algún modo a su cumplimiento. No se puede ser feliz, pero tampoco se puede dejar de obsesionarse por ser feliz.



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