hoja de ginko, dedos finos, y la historia milenaria y breve, anarquía de instantes, como este en que recibes mi cárcel y la devuelves (sin quererlo siquiera) en aire de libertad
No soy yo el primero, ni tampoco el segundo, pero el cuarto me confirma una sospecha que tenía: que no se trataba de la misma persona. ¿Una legión de anónimos es lo mismo que una legión anónima? Develado un misterio, ¿se sabrá algo alguna vez de los demás? ¿Qué pensará el anónimo del otro anónimo? ¿Qué pensarán ambos de este nuevo anónimo que ahora mismo los piensa a ellos?
7 comentarios:
cuántos planes, cuántos planes, hechos espuma...
hoja de ginko, dedos finos, y la historia milenaria y breve, anarquía de instantes, como este en que recibes mi cárcel y la devuelves (sin quererlo siquiera) en aire de libertad
vamos: dad la cara!
(me muero de intriga por saber! son lindas todas esas palabras juntas).
(he sido el segundo, pero no el primero)
y aquí tienes mi cara... ¿logras verla? para que en ella mires el rostro que quieras
si miro el rostro que quiero puede que coincida.y no. o las dos cosas.
(no sirvo para el misterio, me mata la ansiedad)
No soy yo el primero, ni tampoco el segundo, pero el cuarto me confirma una sospecha que tenía: que no se trataba de la misma persona. ¿Una legión de anónimos es lo mismo que una legión anónima? Develado un misterio, ¿se sabrá algo alguna vez de los demás? ¿Qué pensará el anónimo del otro anónimo? ¿Qué pensarán ambos de este nuevo anónimo que ahora mismo los piensa a ellos?
el último anónimo no puede ser Borges, pero (acaso sin saberlo) en el arcano mundo de las palabras, se le parece.
Publicar un comentario