El cubano Juan Formell, director de Los Van Van, señaló que el creador de El otoño del patriarca “posee en sus residencias, más discos que libros”. A esta faceta musical se añade lo que su amigo Carlos Fuentes ha contado el año pasado. Hace tres décadas casi se consagran como cantantes en París, en una velada casera con el escritor argentino Julio Cortázar, de la que quedó como constancia una grabación informal. “Gabo y yo cantamos rancheras y corridos de la revolución mexicana, y Cortázar tangos”, relató el autor de La muerte de Artemio Cruz, quien dice tener esa grabación escondida en su casa del DF.
P/12, hoy.
te podés imaginar eso?
3 comentarios:
A mí me pasó algo parecido. Pero hace menos de tres décadas: hace tres meses.
Una noche salí tan contento del hotel en París (tan contento por estar en París) que sin darme cuenta iba cantando, a mi modo semicordobés mezclado con quechua, una canción de Edith Piaf. Las prostitutas de la rue Saint Denis se quedaron mirándome y los ¿chinos? de las verdulerías se callaron por una vez.
Por supuesto que no me consagré. Ni tengo la grabación. Tampoco era famoso en ese entonces, ni ahora.
Indudablemente esos tipos son tan grandes, que aunque cantaran peor que yo es una imagen superlativa.
El filipeño Niceto Curra, director de Los Vienen Vienen, dijo también algo al respecto. Pero de verdad no viene al caso.
es bueno que un escritor tenga pocos libros en su casa. con la sana excepción de un Borges.
y GGM o JC cantando no ingresan en la categoría de "música". sino de "inefable documento". lo cual no es menos importante, por cierto.
yo, al menos, también quiero escuchar.
jorge: lo que daría por haber podido espiar la escena!
(hay que emborracharte? de felicidad?)
germán: ningún escritor tiene pocos libros en su casa. acaso mucha más música. y sí, ellos cantando... son otra cosa.
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